Amauta

Han quemado al cristo moreno
junto con sus hombros abajo al viento del ritmo
el coro de las tempestades
cargada de idolatría, pérfido escalón
perteneciente a las almas amputadas
que ya no se encuentran en el llano del alba oscura,
salen en las fiestas patronales
a husmear la jora y descifrar los puercos, la tradición,
¡Fuego de mi fuego abre paso a la llama eterna!
caían acertijos rodando sobre el pabellón del barbón
aquel que entregó su vida por nosotros
según hojas de barro
según evangelios
según Lucio...
la cultura,
¡Poca vez he visto amar al hierro!
hay pueblos malditos por su propia gracia
que no diferencian la honda y el criollismo.

Auxiliar

Marca con una equis
el escándalo que prepara mi corazón con la muerte,
danza en pre apuros los floros de un alegre
sucumbiendo el amor que un día fue,
ojala que, prestos los gorriones de fuego,
se culpe a las brujas que me querían despojar de mi madre
cuando bebe yo pues,
¡Que Vegana! ¡Que emergencia! ¡Que auxiliar!
Vendría aquel ramo de árbol
a suponer las nacionalidades en carpetas
que se encuentran dentro de los enfermeros,
sin más preámbulo en ocasiones se ve la puerta abierta
y el toro de oro durmiendo abrazando la cruz roja,
la soga entra y se va a la pena
conversando con la esclavitud,
conmigo ya que
es tiempo,
y haberme dado cuenta antes de sumar los edificios hospitalarios
que rumban las lástimas
de
nuestro diezmo en la vereda entreverada.

Jubilación

Alce, Zócalo y Pedestal

Llévense mi apariencia jubilada cuando muera.

Quizá... se apresure en caer la luna en el colmo de la ceguera
mientras... se pelan las papas mis campesinas hermosas,
no necesito sus calenturas, simple,
su sonrisa meditabunda
para  perdonarme tanta cosa que se cría en la tensión
oprimiendo la textura del pensamiento.

Oh, si acaso me voy
vendré con mas amargura delatadas,
mas sinvergüenza que martes Nibiru
        y aquel que desee empapar su palma caminata conmigo
        y aquel que pinte mi escarapela de virtud
        estará en el paraíso,
        ¡yo lo digo! ¡pasmado de hamor!

lah soledad trama algo con nosotros y ni cuenta,
oh, ah, ay, ¿Por que el silencio nos responde tan sarcástico?
digo pues, enamorado del alma del gato ¡Mistico!
pude obsequiarme la sobredosis de inspiración detallada de gama
aleteando en mi aposento y sacudiendo plumas que me quedan
viendo el cielo llorar...
mi padre esta ahí...
me quiere sufrido
justificado por el tukdam de los budas que piensan en mi
entonces dormiré
pronto naceré en otro cuerpo.

Opinen... escríbanme... quiero amarles mas de lo ya,
deseo explotar en mi dos ranas cantadas de mar azul,
merodear la plata del cristal y el oro de la luna, poesía,
las curvas de mis dedos excitan a la muerte,
es un aliento erótico que se siente cuando llega el pánico
azotando las tasas en mi enrejada discordia con la humanidad
ah, en mi, mi, mi, mi, mi...
en primera persona es mas fácil danzar mucho poema
literal olivar de la mesa que se enciende con la pluma
la rectitud oriental de la Húngara asiática
palabras, palabras, palabras...
tender la ropa cuadriculada en ambos rangos súbditos
sofocarse con fresas de las cabalgadas de cemento
que deja el núcleo de la bomba inaudita,
turbo, piano, colorados, peine, amarre, lunar, gringo,
no se puede con el ingenio del genio
es inevitable, reconforta al superlativo del instantáneo
donde fantasias brincan juglar, venado de llamas
para desparecer tengo que asfixiar tu alrededor,
cierra los ojos, estaras bien en algún otro siglo,
yo mismo te llevare lejos sin que nadie puede agarrar mi saco de sorpresas
las cañas de mi piñata, acompáñame, quiéreme por favor y por piedad
en los arbustos se encuentran los libros perdidos
pero aun no es momento de fomentar a los obreros.

Me sigo yendo y no te veo venir...

Si nunca moriré
¿Cual es el problema? ¡Exijo algo mas con que pueda vestirme!
¡Alarga la confianza que nos queda por coser... esta creciéndome la barba!
¡Tengo miedo! ¡Tengo un hijo! ¡Tengo un voz!,
¡Frena! ¡Las plantas están lagrimeando!
No sera buena idea andar contigo,
que bueno por ti que dudaste y que mortífero por mi
pues que confié demasiado
pues cante bastante hoy, lo siento.

Reducto

Cargan las pesas del viento...
mis lenguas que dejé en las bancas soñadoras,
pudren su vestido y crean el nuevo ritual
apurando xalmo, apurando xalmo
sin imaginar el gremorio más letal
cosechado sin finta al brujo lindo
amarrado con cabello,
mierda, mierda,
el aroma del eslabón pasa desapercibido,
los tesoros son poyos de gloria,
el paso cansado mío se purga del destino,
aparea sus muñecas con el futuro.

Hoy jamás besaré la vida que no fue
en la meditación más cercana a estudiar
... solo arrastrare mi apellido mutilado.

Belmond

¿Quien desea penetrar mi alma?

¿Quien desea hacer el amor conmigo?

Inmaculada

Ahora que esta moribunda en la escalera
arrepientes la melancolía del odio desatado,
tu madre llama a tu sombra una vez más prisa...

Se dice que el que ama obvia la muerte
la cruz de metal que tambalea en la curva del dedo del santo
ah, no es tarde,
el girasol le ama al viento, ¿y tu?
no puedes amar si asesinas a tu clavel,
tendrías que volver a nacer
pasmarte en el vientre militante de la tierra,
llorar, llorar, llorar hacer ver las arcas de tus lágrimas,
enojar la carta de la vida cansada que atribuye sus codos quemados
llorar, llorar, llorar... escapar del orgullo y la triste realidad.

Dime... digan...

¿Quien fue aquel hombre que entregó su vida por vosotros, los niños?

Y no me digáis Jesús, porque los carpinteros no estuvieron en su funeral...

¡Responde sin ocultar la voz del pueblo.!

Sabes que fuiste tú el ser que no se espanta del tártaro milenario,
el barbón desnudo que agita sus alas con hueco sin rencor
¡Quizá! Me digáis -comprareis vuestra suerte-
y es el miedo que acaricia los perros del alma muerta
pero yo, un mortal más
gritaré consecuente ¡Vivid! ¡La muerte no existe! ¡Es el viaje eterno!
¡La separación de nuestros hijos! ¡La amputación del espíritu!
Eh, no suena la búsqueda en los camellos de la biblia que párrafo por párrafo
consumen la historia universal que es una sola,
no huyas.. Cobarde... no dejes que otro vean como tu abuela se declina
ten la suficiencia de levantar el fierro de las piernas morenas
adelante, adelante, ve, ve...
corre, avanza, encapríchate del tiempo
las mañanas tienen buenas anécdotas para secarlas al sol,
¿Y el padre que masturba su mirar en el vacío?
Leerá esto algún día entre los muertos.

¡OH, OH, que dolor es este que siento en el pecho y no tiene nombre!

Si existe aquella persona que sienta lo mismo que yo,
que invoque mi ágil identidad porque estoy en todas partes,
aunque no me puedan ver.

Rosa

Acabaría con la rosa de la mente física
aquella estatua pensante que mira triste colgado del viento,
toga inmaculada de aguacero que despeina su falda y su puño
en la quijada partida del idealista
congregando el alba del monumento persiguiendo filosofías,
sabiendo que el poeta no tiene edad y los pájaros son afroditas de la
creación, antagonistas del cielo.

Metafísica, Violetas,
el ensayo del hombre, la obra del genio cobijado en la esperanza de la humanidad y la salvación
manipulando las granadas cubiertas de religión que ruedan de la fe y la cultura.

La orquídea jubilada del otro mundo
duerme en las enormes manos de un gigante que además sostiene vuestro hogar y la línea de los planetas,
puesto en el cuello el anillo de Saturno.

Niña Ave

Verás huir la noche de vez en cuando
y tu sombra al sombrero de la esquina
entre relojes baratos y sefardíes
acostumbrados a los suicidios de ave.

Concha su madre la mayor de las hermanas
dueña de ventanas y estrellas perdidas,
arma aviones con los dedos en el cielo secuestrado
y con la resaca de sus manos ofrece amor.

Linda y oro, suscita la rebelión de la paz.

Genia de los mares del día.

Verás huir la noche de vez en cuando
y tu sombra acompañará
entre bastones, Romeos y tildes dobladas.

Luego morirás, convertída en ave.

Universidad

APRENDIZ

Morirán abriendo la puerta
los dragones,
príncipes delgados que cristal lucario
semejante vela que el fuego del evento permite en los juegos de  magos
y con razón los aprendices burlan al minotauro y la medusa paralela
y con razón no hay respuesta de las mascotas, compañeros de batalla.

Acercan el balde,
¡el agua ultrajada de los venados!,
y que más hay en el bosque muerto si no espíritus hambrientos,
lechuza del nuevo orden advierte sangre por colmillo de bestia
que collar lucirá el siguiente heredero del trono.

Premio orco,
la clavícula del jugador rompió el diente del cabello
no fue momento de ser llevado a la nave,
debéis de ser constante
y más aún cuando escapan ángeles de suerte en la preparación.

La voz le dijo al trueno
-debemos unirnos- por que el color sin llanto es un imán desnutrido.

GUERRERO

Vendas de dos
en el líquido izquierdo de las Andreas.

Por supuesto de espaldas ¡San Guerrero!

Abrir la gloria del cofre para fortalecer el cuarzo yugular en los montes de aleluya,
bendecidos están ya por el Dios de la guerra
que cierra los puños desde las alturas prolongadas donde sentado disfruta
el festival de los velos, la santa inquisición, la música, la oda.

Por supuesto de espaldas ¡San Guerrero!

Testigo de humanidades
que las condecoraciones de Zeus vomitó en sus plagas.

MAESTRO

Gracia divina e adagios
ahora que el elefante blanco cayó en el redondel
se alabara paciente y comprensivo,
debe florecer la guirnalda en el tormento de los barcos
que destinan en los puertos de la sapiencia.

Regalan los libros,
aplican los sermones abreviados
encantan y danzan
atrapan moscas con los dedos, son los nuevos dioses.

La frente tiene otra cara en sus caras
munición del arquero
al abecedario de un alumno traído por los vientos
que descansa en el regazo de una gaviota,
el maestro titanio, lupus,
el rebaño aprenderá más que ayer dónde la luna oculto su luz
y el sol sonó sus campanas empolvadas de la historia marrón,
carpinteros de páginas.

Ofrece los huertos grandiosos.

SACERDOTE

En galones de hojas,
el más corto y largo de aprender
sosteniendo la dicción Jehovana,
la fuerza en los bastones de ira que carga el molar,
aquél que carga el beso de la diosa en la frente
y los hijos de Abed en el cinturón de fuego.

Diálogos de dabidu.

¡Devuelve el empleo a los oídos que nos escuchan!

Pisa las rosas.

¡Mañana vosotros las sembraréis!